miércoles, 31 de enero de 2018

Cara a cara

Nunca la imagen del espejo es la misma. 

Nunca termino de ver o saber cuántos lunares tengo. Lo he intentado, pero se me olvida. La nariz, dicen, crece sin parar y no lo noto porque ya es grande. Hay anuncios de un par de arrugas. Hay pelos, unos gruesos y unos delgados. Tengo tantas manchas que solo sé que aumentan. Se caen las pestañas y nunca noto cuando crecen. Crecen los pelos de las cejas y arranco algunos; a veces se enquistan, pero no duelen. Algunas veces hay granos chiquitos, abultados, negros o sin color. Se quiebran los labios, pero los reparo. Se hacen bolsas en los párpados y salen ojeras. Las bolsas se quitan a medida que avanza el día, las ojeras se quedaron hace muchos años, pero no sé hace cuántos. La piel a veces es más morena o se ve más blanca; se ve diferente al cuello y a veces descamo.

No puedo aferrarme a esa que veo al frente, tengo que generalizarla. Nadie podría nunca dar fe de que es así o no.